jueves, 8 de enero de 2015

Excesos navideños




¿Cómo compensar los excesos navideños?


Acabaron las fiestas y con ellas los excesos propios en estas fechas, en los que los alimentos que predominan suelen ser ricos en grasa, azúcares y alcohol. Por ello, es muy importante que en los días posteriores a los excesos intentemos depurar nuestro organismo.
Una dieta depurativa, no consiste en pasarse varios días a base de líquidos y sin ingerir apenas ningún alimento. Consiste en consumir alimentos saludables que nos ayuden a eliminar ciertas sustancias de nuestro organismo, y que a la vez nos alimenten.

Los excesos navideños, acompañados de los malestares digestivos, sensación de pesadez y esos temidos kilos de más que nos acompañan en estas fechas, es lo más común y propio en estos días que acabamos de pasar. Por eso, es recomendable realizar una dieta que depure nuestro organismo de todos los excesos que hemos realizado.
A la hora de poner en marcha el propósito de año nuevo más frecuente entre todos, la pérdida de peso, hay que realizarlo a cargo de un profesional de la salud, ya que la mayoría de dietas que se ponen de moda, generalmente porque son realizadas por las famosas, pueden originarnos un desequilibrio metabólico y, en este caso, las consecuencias pueden ser peores e incluso poner en peligro la salud. Por ello, los días posteriores a los excesos navideños, hay que realizar una dieta depurativa y, sobretodo, saludable, que no ponga en peligro nuestro organismo, sino que lo proteja.

Lo principal es no ser muy estricto, ya que no podemos pasar de comer gran cantidad de alimentos a comer muy poco. Lo que hay que tener en cuenta en primer lugar, es la calidad de los alimentos que ingerimos, es decir, la elección de los mismos.

No debemos saltarnos ninguna comida. Lo ideal es realizar 5 comidas diarias, es decir, comer poco en cada comida pero varias veces al día, y nunca saltarnos el desayuno porque es la comida que nos da la energía para comenzar el día. 

La elección de los alimentos es muy importante. Debemos evitar los alimentos ricos en grasas, azúcares, alcohol y sodio, y elegir los que sean ricos en vitaminas, minerales y proteínas, sin grasa y que contengan una gran cantidad de fibra y de agua.
Los alimentos que reunen estos requisitos son: 
  • Frutas y verduras en abundancia, en lo posible crudas ya que mantienen más cantidad de nutrientes, fibra y agua que las verduras cocinadas. Podemos optar por la cocción al vapor que es la que menor pérdida de nutrientes ocasiona. La piña es un buen aliado por su capacidad diurética y depurativa.
  • Hidratarse adecuadamente bebiendo grandes cantidades de agua y líquidos en general, como pueden ser zumos sin azúcares añadidos. También debemos de evitar los refrescos y las bebidas alcohólicas. Hay que beber unos 8 vasos de agua diarios. Las infusiones son una forma de ingerir más cantidad de agua.
  • Lácteos desnatados, priorizando al yogur, la leche y los quesos frescos ya que poseen menos grasas, sodio y más agua que los quesos curados.
  • Cereales integrales que nos aporten fibra y nutrientes y nos produzcan una mayor sensación de saciedad. Además nos ayudarán a limpiar nuestros intestinos.
  • Carnes sin grasas y bajas en colesterol como el pollo, pavo, conejo. También son muy recomendables los pescados blancos. Las carnes rojas y los pescados azules hay que consumirlos de manera ocasional en este periodo depurativo.
  • Reducir el consumo de sal en las comidas y reducir el consumo de comidas precocinadas que suelen tener un alto contenido en sal. De esta forma, evitaremos la retención de líquidos. 
  • Podemos utilizar especias y hierbas aromáticas para condimentar nuestros alimentos y que estén más sabrosos a pesar de llevar menos sal.
  • Los métodos de elaboración de los alimentos que deben predominar son: cocción, al vapor, plancha, papillote, horno, microondas.    
La práctica de ejercicio físico nos ayuda a obtener nuestros própositos más rápidamente y evita la flacidez de la piel.
                  

No hay comentarios:

Publicar un comentario